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España está sufriendo desde hace años un problema generalizado y creciente de escasez de precipitaciones, que no aseguran en muchos casos los mínimos necesarios para el consumo humano básico, menos aún el riego de zonas verdes, lo que obliga a racionalizar el uso de agua. Este problema es especialmente patente durante los meses de verano, en los que se produce usa ausencia casi total, que hace descender notablemente los acuíferos subterráneos y los niveles de ríos y lagos.

En el caso del abastecimiento de agua para riego de zonas verdes privadas de la Urbanización “El Soto”, esta problemática es, si cabe, más grave, puesto que el recurso hídrico procede de las lagunas existentes en el sector, completada con agua potable procedente del Río Duero hasta los límites que permiten las infraestructuras hidráulicas existentes en el sector, actualmente funcionando prácticamente al 100% de su capacidad durante los días de verano, fundamentalmente por la enorme demanda de agua para riego de céspedes privados de un pequeño porcentaje de parcelas sobre el total, que aglutinan la mayor parte de agua consumida, con cifras que superan ampliamente tanto las recomendaciones de la OMS como las especificaciones del planeamiento local y el Plan Hidrológico Nacional.

Si bien en los primeros años de ocupación de “El Soto”, con los aproximadamente 250m3 diarios de agua de riego que proporcionaban entonces las citadas lagunas (el acuífero actualmente ofrece mucho menos volumen), se podía abastecer perfectamente tanto el riego de las zonas verdes comunes como el de las parcelas privadas (hecho por el que se estableció una tasa por la prestación del servicio municipal de suministro de agua de riego muy inferior a la del suministro del agua potable, al ser entonces su coste menor al de la potable), desde hace años la situación ha derivado en insostenible, no pudiendo garantizar el suministro de agua para riego a la inmensa mayoría de parcelas de la Urbanización “El Soto” que sí hacen un uso racional del recurso hídrico y no disponen de regularidad en el mismo, a causa de un pequeño porcentaje con demandas desproporcionadas, agravado por una tarifa que no penaliza lo suficiente algunos consumos muy superiores a 1.500 litros de agua de riego al día.

Por este motivo, el Ayuntamiento de Aldeamayor de San Martín, complementariamente a la adopción de medidas de mejora de las infraestructuras, pretende:

• Eliminar por completo la tarifa de suministro de agua de riego de parcelas privadas no deportivas de superficie inferior a 2.000m2, para compensar no la mitad, como hasta ahora, sino todos los días del año (365 de 365) en los que pudiera no existir suministro de agua de riego, o ser éste deficiente, bien por heladas, bien por sequía-insuficiencia del recurso hídrico.
• Incrementar las tarifas aplicadas a consumos de agua de riego superiores a 80m3/trimestre (900 litros de agua de riego al día por vivienda), haciéndolo coincidir a partir de ese volumen con los tramos existentes en el agua potable, dado que todo volumen consumido de agua de riego que supere 27m3 al trimestre, realmente es agua potable y que sólo unas 125 viviendas-parcelas (el 16%) presentan consumos superiores durante el tercer trimestre del año.

Con la aplicación de esta modificación, tendente a disuadir en el gasto innecesario de agua en el riego de zonas verdes privadas, no se produciría beneficio económico alguno, sino sólo una pequeñísima reducción del déficit del servicio, pasando de un 60% a un 55%.

A modo meramente orientativo, una parcela de la Urbanización “El Soto”:

• …que consume 0m3 de agua de riego en un trimestre: con las tarifas vigentes abona 1,50€, pasando a abonar 0,00€ con las nuevas propuestas.
• …que consume 30m3 (333 litros/día de agua de riego): pasaría de abonar 11,40€ a 9,75€.
• …que consume 80m3 (888 litros/día de agua de riego): pasaría de abonar 27,90€ a 26,25€.
• …que consume 150m3 (1.666 litros/día de agua de riego): con las tarifas vigentes abona 84,00€, pasando a pagar 131,25€ (si mantiene el consumo y no lo racionaliza, bien por sensibilidad hacia la situación actual y por empatía al resto de vecinos o por lo disuasorio de la tarifa en el tramo alto).

 

En resumen: la tarifa de agua de riego se ve reducida para nueve de cada diez viviendas e incrementada sólo para aquéllas que superan los 1.000 litros de consumo de agua de riego al día.

 





Todo volumen consumido de agua de riego de una parcela de la Urbanización “El Soto” que supere 27m3 al trimestre, realmente es agua potable (si se destinase todo el agua de riego de las lagunas a las parcelas privadas, puesto que si considera que buena parte ha de emplearse en el riego de las zonas verdes comunes este volumen se reduciría incluso a 15m3/trimestre), cobrada a precio de agua de riego.
Sólo unas 125 viviendas-parcelas de la Urbanización “El Soto” (el 16% de las 762) consumen más de 100m3 de agua de riego durante los trimestres de verano.
En el segundo trimestre se detectó que 16 parcelas-viviendas de la Urbanización “El Soto” llegaron a consumir cada una más de 180m3 (2.000 litros de agua de riego al día de promedio), hasta un total entre las doce de 3.516m3 (tres millones y medio de litros durante el trimestre, con un promedio de 3.255 litros/vivienda y día). En el tercer trimestre se localizaron asimismo 29 parcelas-viviendas que consumieron cada una más de 180m3, hasta un total entre las veintinueve de 6.809m3 (casi siete millones de litros durante el trimestre, con un promedio de 2.610 litros/vivienda y día).