Hay veces en las que uno siente la necesidad de decir algo, porque si no lo hace, se genera una insatisfacción personal difícil de compensar.

Hoy, en Castromonte, hemos vivido algo verdaderamente maravilloso: recibir a María y a su familia y brindarles una acogida cálida y multitudinaria a través de una marcha benéfica, con el único objetivo de ayudarles en lo que más necesiten, para aliviar —aunque sea un poco— el dolor inmenso que supone afrontar la enfermedad difícil de una hija.

Estamos profundamente orgullosos de vuestra respuesta, con una participación ejemplar. Tengo entendido que nos hemos acercado a los 5.000 € recaudados, una cifra que habla de la solidaridad y el gran corazón de nuestro pueblo.

Desde el Ayuntamiento, queremos dejar claro que este tipo de iniciativas siempre contarán con nuestro apoyo. Vuestra implicación y generosidad nos dan fuerzas para seguir trabajando por Castromonte, un lugar del que nos sentimos muy orgullosos.