• 2016-02-22 14:25:14
    Urbanismo

    Si le ha llegado un recibo de IBI en las últimas semanas y le piden que pague una determinada cantidad correspondiente a los últimos tres años, su propiedad está dentro del plan de regularización catastral.

    La Dirección General de Catastro inició hace ya tres años un procedimiento para que todas las construcciones no declaradas de cada municipio (obras nuevas, rehabilitaciones, ampliaciones, ...) tributen por este impuesto de acuerdo con la realidad de sus inmuebles y su capacidad económica. Esta actualización se realiza en más de 4.172 municipios del país y ahora le ha tocado el turno a Feria. Esta actualización se ha realizado con fotografías por satélite, de forma que han visto si el propietario del terreno tenía construcciones, de cuántos metros, si ha añadido una piscina... Así detectan los cambios que han podido desarrollar sus dueños en los últimos años y han cruzado los datos con los que tenía Catastro. El resultado es un recibo de IBI actualizado y se reclaman desde 2013.

    Es Catastro, dependiente del Gobierno central, el que determina qué debe tributar y quién. El Ayuntamiento se encarga de su cobro y a el llega solo una parte del mismo para gastarlo después, dado que este impuesto es la principal vía de financiación de la administración local, pero NO se trata de una nueva subida del impuesto por parte del Consistorio, sino de una revisión de las construcciones por parte del Ministerio. La idea es que los propietarios tributen el impuesto por lo que realmente tienen.

    Esta revisión se ha desarrollado en el término municipal y está resultando especialmente alarmante en todos los poblados. El motivo, ha sido un fallo informático en los domicilios a los que se han enviado las notificaciones. Ese error ha hecho que algunos titulares aparecieran como desconocidos. Tras dos intentos de entrega, Catastro publicó las reclamaciones de IBI en los boletines oficiales. Y, así, dio por terminado el proceso de información previo al recibo que gira el Ayuntamiento y que en muchos casos se corresponde a tres años, que es el periodo máximo que se puede reclamar.

    De esta forma, esos titulares se han encontrado de repente con el recibo y sin posibilidad de reclamar. A todos los que aparecían como ‘desconocidos’ se les va a enviar de nuevo una notificación individualizada, de manera que dispondrán de un nuevo plazo para presentar reclamaciones en Catastro. En los boletines se han publicado un millar de notificaciones. Además de ‘desconocidos’ entre ellas aparecían otros motivos para no recoger las notificaciones, como ausentes o no recoger la carta.

    Este procedimiento masivo no es habitual y se debe a un convenio de Catastro con la Federación Española de Municipios y Provincias, que reconoce que está teniendo una repercusión positiva en la financiación de los ayuntamientos.

    El porcentaje del Valor Catastral que se aplica en nuestro Ayuntamiento, como la Ley marca, puede abarcar desde el 0,4 hasta 1,3 % del valor total catastral del Inmueble. Y dentro de esta horquilla, en la actualidad en nuestro Ayuntamiento está fijado un gravamen sobre los Bienes Urbanos de un 0,80% y sobre los Bienes Rústicos de un 0,84%.